Momentos de flaquear,
Momentos de ansiedad y desenfoque, en los cuales desesperamos y empezamos a buscar en lo externo.
No encuentro nada más que respuestas que me confunden más.
Nada está ahí afuera, entonces.
Pero es más fácil dejar de ahondar en el interior cuándo empieza a doler.
Y es más fácil ir afuera y preguntar qué pasa.
A veces no te la bancas solx.
Podes preguntar lo que quieras, podes alejarte de vos completamente, dejar de escucharte, y hacer caso.
Pero, ¿Qué nos enseña esto?
Quizás a comprender desde el cuerpo y la propia experiencia, que podrán decirnos lo que quieran, que podemos buscar en mil lugares, pero que no existe otro lugar que el corazón.
Cuándo caemos en cuenta solxs o con empujón, de la distancia que ponemos de nosotrxs mismxs, y en la falta de escucha, es una oportunidad nueva para renacer y volver a la raíz de nuestra esencia.
El camino es la vida misma a través de la práctica, y ser conscientes de los obstáculos y enfrentarlos nos hace crecer.
Tapas- devoción- fuego transformador.
Confío. Y gracias por ser tal cual es.
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