La profesora de Yoga, Silvina Lamorte, nos cuenta sobre su experiencia personal sobre la práctica de Kundalini Yoga.
Mi primer contacto con esta práctica
Entré a una clase de Kundalini Yoga hace unos 15 años, y desde ese entonces, hago, practico, conecto, medito o simplemente respiro consciente casi a diario.
Lo que más me cautivó de esta práctica fue que la profesora me hizo sentir que yo podía, me empoderaba desde un lado que despertaba la confianza en mí, que por ese entonces la tenía anulada.
Después de varios años, nos pusimos a hacer la formación con un amigo, nunca pensé que era para terminar dando clase. Me anote pensándolo como una escuela de vida donde me enseñaban cosas que no había aprendido ni en la primaria, ni en la secundaria. Cosas como… el cuerpo, las emociones, la respiración, la voz, el canto de mantras, conectar con uno mismo, hacer servicio, cultivar la disciplina, conectar con el corazón, ser empático. Me encantaba aprender estas cosas y en esto me fui perfeccionando.
Kundalini parte a parte
Kundalini es uno de los tantos estilos de Yoga que hay, la diferencia de este es que tiene varias partes como si fuera una receta de cocina. Primero abrís la clase con un mantra que dice ¨ Ong Namo Guru Dev Namo¨ y ese mantra te conecta con la cadena dorada de maestros de kundalini y con los que vos traigas, pero sobre todo con tu propia maestría, esa que te habita. Luego se hace una entrada en calor del cuerpo, para después entrar en la Kriya, así se denomina a la serie de posturas a realizar para lo que quieras trabajar.
Hay, literal, 8 millones de Kriyas, para lo que se te ocurra, para los órganos, para el coraje, para el miedo, para la mente neutral, para lo que necesites, quieras y busques, hay. Luego de la serie se recomienda una relajación para que el cuerpo absorba toda la nueva info que le diste, sueltes todo y te dejes hacer upa por la tierra. Y para finalizar una meditación, que a veces también puede estar dentro de la kriya, estas meditaciones pueden ser con respiraciones conscientes o mis favoritas, con canto de mantras.
La importancia de los mantras
Kundalini trabaja con muchos mantras, ya que tienen el poder de hacer que la frecuencia de pensamientos, el ruido mental, tu radio interna se corte, y conectes con la dulzura de tu voz, con el poder de tu voz, que tiene una vibración sanadora, que actúa desde adentro hacia afuera y sigue siendo aire que entra en su estado puro y sale convertido en sonido. Al finalizar la práctica la clase se cierra con otro mantra que dice ¨Sat Nam¨ y este mantra es una invitación a que cada uno conecte con la verdad universal y con su propia verdad.
En una clase de Kundalini, como con una película, como con un libro, como con la vida misma, tenes que experimentarlo, pasa la experiencia por tu propio tamiz y si te gusta, te hace bien, te recuerda, es para vos, y si no lo es… lo sabes por qué lo probaste vos.
Amo esta práctica porque me invita a despertar, compartir y tener bien viva mi energía, y creo que de eso se trata ser parte de la vida.
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Mañana es Jueves de #communitytopic
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Mañana recibimos a Silvina Lamorte quién nos cuenta todo sobre el Kundalini Yoga.
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Namasté
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